El próximo 18 de marzo se celebrarán elecciones presidenciales en Rusia para decidir quién será el próximo jefe de estado.
Situación de Rusia
Actualmente, Vladimir Putin es la persona que más tiempo ha ostentado el cargo presidencial desde la caída de la URSS. Tras estar durante dos legislaturas consecutivas (2000-2004 y 2004-2008) impulsó un cambio constitucional para ampliar el tiempo del mandato presidencial a seis años. Por ello, el actual presidente, tras ganar en las elecciones de 2012, se postula para gobernar la federación otros seis años más y seguir batiendo el récord de duración.
El cargo de presidente es equivalente al de jefe de Estado, y tiene asociadas las funciones de guardián de la Constitución, puede vetar proyectos de ley, es responsable de la definición de las líneas maestras de la política nacional e internacional y comandante supremo de las Fuerzas Armadas.
Desde el año 2000 se llevaron a cabo una serie de reformas políticas que propiciaron que, prácticamente, los únicos partidos con capacidad de disputarse el poder sean el Partido Comunista y Rusia Unida. El resto de partidos no eran rivales, ya que no contaban con una verdadera presencia a nivel nacional y sus cuadros estaban mal estructurados.
Y, aunque parezca lo contrario, todo sigue igual. Putin cuenta con más de un 70% de apoyos según las encuestas, unos buenos porcentajes de aprobación de su gestión y los candidatos alternativos que han surgido para disputar el poder podrían ser una maniobra del Kremlin para mostrar una falsa apariencia de pluralismo político.
Aún teniendo el camino fácil, Putin tendrá que afrontar una reinvención de la economía rusa tras las elecciones, si quiere salir de uno de los periodos más críticos desde su llegada al poder. Los ingresos derivados del petróleo y minería son fundamentales para la economía rusa y están dejando de funcionar. El país también salió de su recesión económica en 2017 y registró un crecimiento del PIB del 1,5%. Actualmente, Rusia es considerada como una de las economías emergentes del grupo de los BRICS.
Con la exposición internacional que traerá el Mundial de Fútbol en los meses de verano, la Federación rusa se enfrenta a una serie de desafíos, como el afianzamiento de la recuperación económica, desviar la atención de los problemas políticos internos (la falta de independencia judicial, la ausencia de una oposición real, la represión de colectivos de defensa de los derechos civiles o las tensiones con Ucrania por la península de Crimea) y desvincularse del escándalo de las fake news y la injerencia electoral en las presidenciales estadounidenses.
Sistema electoral ruso
Rusia afronta el próximo domingo sus elecciones generales, en la que será la primera vuelta electoral. El sistema electoral ruso prevé que, en caso de que ningún candidato obtenga mayoría absoluta el día 18 de marzo, la segunda vuelta tenga lugar el 8 de abril. En esta última resultaría vencedor el candidato que obtenga la mayoría simple de los votos.
El presidente será elegido por votación directa mediante sistema mayoritario. Su elección es para un mandato de seis años y se exige para ser presidente ser mayor de 35 años y haber vivido en el país permanentemente durante al menos 10 años.
También, para ser candidato se han de reunir dos millones de firmas, con un límite de 50.000 en cada sujeto federal, tanto si es un candidato independiente como uno apoyado por uno o más partidos políticos.
Candidatos a las elecciones presidenciales rusas
Aunque la mayoría de los titulares en medios plantean a Vladimir Putin como el inequívoco ganador, existen siete candidatos más en la carrera presidencial. Parece que Putin no los entiende como contrincantes y decide no asistir al debate electoral televisado para fijar sus posturas políticas ante ellos de cara a la nueva legislatura.
Brevemente, los ocho candidatos son los siguientes:
Vladimir Putin (65 años)
Actual presidente y candidato independiente, respaldado por el partido Rusia Unida. Según el centro de opinión pública VTsIOM, más del 71% de los rusos votarían por él.
Pável Grudinin (57 años)
Candidato del Partido Comunista y autoproclamado “candidato de las fuerzas de la izquierda patriótica”. Sorprendió que el Partido Comunista designase al empresario millonario y admirador de Stalin, en lugar del histórico ZIuganov. Sería el único candidato que podría alcanzar cerca del 10% de los votos.
Vladimir Zhirinovski (71 años)
Candidato del Partido Liberal-Demócrata de Rusia. El ultranacionalista ruso ha sido en ocasiones comparado con Donald Trump y los sondeos le atribuyen un 5,7% de los votos. Es la sexta vez que se presenta como candidato.
Sergey Baburin (59 años)
Candidato de Unión Popular de Rusia, formación nacional-conservadora. Baburin fue exvicepresidente de la Duma (cámara baja del parlamento ruso) y no cuenta con mucha relevancia política.
Ksenia Sobchak (36 años)
Única mujer y la candidata más joven por el partido Iniciativa Civil. Es una conocida periodista de televisión y próxima a la oposición liberal. Los sondeos le atribuyen poco más de 1% de los votos.
Boris Titov (57 años)
Candidato del Partido del Crecimiento. El economista se considera liberal de derechas y plantea un programa electoral centrado en medidas para la recuperación económica. Según las encuestas, obtendría el 0,4% de los votos.
Grigori Yavlinski (65 años)
Candidato del Partido Demócrata Ruso Yábloko. En su programa quiere normalizar las relaciones con la Unión Europea y Estados Unidos, así como incrementar el presupuesto para la salud, la educación, la cultura y el deporte. El candidato se presenta por tercera vez a presidente.
Maxim Suraikin (39 años)
Candidato de Comunistas de Rusia, partido que surge como una escisión del Partido Comunista en 2012, con una relevancia política mínima. El programa electoral que presentan lleva el título “10 golpes de Stalin sobre el capitalismo”.
En definitiva, prácticamente todos los sondeos y expertos apuntan a que Vladimir Putin ganará este domingo con más de dos tercios de los votos y no tendrá lugar la segunda vuelta. Con esta victoria, Putin iniciaría su cuarto mandato en el Kremlin.