Albert Rivera vs Pablo Iglesias: El debatuiter

La nueva política pasa por cambiar las formas. Por ello el pasado domingo 5 de junio tuvo lugar el segundo debate organizado por Salvados entre Albert Rivera, líder de Ciudadanos, y Pablo Iglesias, de Podemos. El programa dirigido por Jordi Évole ya realizó un exitoso intento hace unos meses en el Bar El Tío Cuco, caracterizado por la ausencia de formalidades típicas en un debate político de alto nivel. De ahí que esas formas relajadas y respetuosas, demandadas por la “nueva política”, hayan sido denominadas por Évole “el espíritu del Tío Cuco”. Sin embargo en esta segunda edición la tensión era más palpable… y eso se notó en las redes sociales.

Con el hashtag #PartidoDeVuelta la audiencia comentó los aspectos más relevantes del debate. Nosotros no fuimos menos. Si nos seguisteis comprobaréis que hemos sido un poco más gamberros que de costumbre. Una vez al año no hace daño. Para la realización de los memes contamos nuevamente con la colaboración de Jorge López. Si os gusta su trabajo, decidle que vais de nuestra parte.

Os dejamos aquí un #tuitresumen del debate.

Como suele ocurrir, previamente ya se iba notando el ambiente en redes.

Los candidatos saben que una forma de medir quien ha ganado un debate es analizando las palabras que se quedan en el ambiente, que calan entre la audiencia o incluso que se replican en redes sociales. Y eso se hizo tanto intentando etiquetar al contrario (“Venezuela”, “Ibex 35”) como usando la ironía como defensa (“Cubazuela”).

En un debate no solo ganas lanzando argumentos al contrario sino también esquivando las preguntas del moderador para no quedar mal.

La publicidad que se le había dado al programa los días previos había resaltado momentos como éste, en el que la ironía entre los debatientes primaba por encima del cruce de ideas. La asociación “suena a chino” > China > Comunismo supuso un caldo de cultivo estupendo para la guasa tuitera.

 

 

 

Uno de los temas de la noche fue el de los refugiados, que tanto hemos tratado en Cámara Cívica. El propio Évole pensaba que en cuestiones de Derechos Humanos estarían de acuerdo y sin embargo…

Cuando se acusa de falacia o demagogia al contrario y luego tú haces lo propio quedas el doble de mal. El lapsus de Rivera de “abrazar niños refugiados” no gustó demasiado.

Después de China y los refugiados, el otro gran tema de “política internacional” fue Venezuela.

Tanto hablar de la situación de Venezuela y sus posibles relaciones con Podemos dejó en el tintero otros temas de política doméstica. Nosotros hicimos una sugerencia.

Entre tanta campaña electoral surgió el tema del “infotaiment” en los que se mezcla entretenimiento e información política. Hemos pasado demasiado rápido a acostumbrarnos a programas donde los políticos hacen deporte, cantan, bailan… y parecía un buen tema para el debate.

El clima de tensión fue en aumento, de manera que Jordi Évole tuvo que moderar.

Finalmente, parece que se puede dar por terminado el “espíritu del Tío Cuco”. Con todo, se mantiene la idea de la importancia de debatir.

 

En conclusión, parece que este debate se aleja de lo que representó el primero: frescura, renovación, cercanía, respeto. Y así se reflejó en la decepción de las redes.

https://twitter.com/FernanCamacho/status/739559674194866176

https://twitter.com/quiquepeinado/status/739558744082808832

 

De todas formas, si no pudiste verlo o quieres rememorar grandes momentos que han quedado para la Historia de la Televisión (es un decir), te dejamos el programa a un click.

Y ya sabéis, ¡mandadnos vuestros memes favoritos del #PartidoDeVuelta a nuestro Twitter!