Nos han acompañado desde que jugábamos en nuestra Game Boy, pasando por todo tipo de merchandising, películas, campeonatos y eventos, hasta llegar incluso a los memes más emblemáticos de la actualidad. Pokémon es la franquicia más rica del mundo gracias a todo el despliegue de medios que ha traído el desarrollo de su universo. Y como en cualquier mundo ficticio, estas criaturas también se han politizado en numerosas ocasiones.
Sistema político del Mundo Pokémon
Todo el mundo conoce la mecánica principal de los “poket-monsters” o “monstruos de bolsillo”, la cual consiste en lanzarles las famosas Pokéball para poder atraparlos, pero en realidad, este universo va mucho más allá.
En cada generación, la compañía nos ofrece una nueva región repleta de nuevas criaturas para capturar, entrenar y completar desafíos. Durante los videojuegos de la saga principal, solemos comenzar con nuestro personaje protagonista realizando una de las decisiones más difíciles que se nos hayan planteado a la generación millenial: elegir nuestro Pokémon inicial. A finales de la década de los 90 ‘s, tuvimos que elegir entre Bulbasaur, Charmander o Squirtle, y una vez tomada la elección, comenzábamos todo un recorrido por la región de Kanto, retando a los diferentes Líderes de Gimnasio.
Planta, Fuego y Agua son los tipos de los Pokémon iniciales en cada generación, imitando el clásico Piedra, Papel o Tijera, solo que, conforme avanzamos, esto se complica.
A medida que progresamos en la aventura, vamos aprendiendo poco a poco acerca de las dinámicas entre fortalezas, efectividades, resistencias, debilidades o incluso inmunidades que puedan tener entre sí, reunidas en la famosa Tabla de tipos: toda una cuadrícula de ingeniería matemática con 18 tipos diferentes y múltiples combinaciones (ya que algunos Pokémon pueden tener hasta dos tipos) aumentando exponencialmente las variables resultantes. Es decir, es una especie de Piedra, Papel o Tijera llevado al extremo.
Por otra parte, la figura del Profesor suele ser recurrente, quien intentará incentivarnos a completar la famosa Pokédex, una enciclopedia donde iremos recopilando información a medida que encontramos y capturamos nuevas criaturas. Otro punto a favor de Pokémon, al fomentar la investigación y la curiosidad en sus jugadores. A pesar de las capturas ilimitadas, tendremos que mandar a nuestros compañeros virtuales a descansar a las conocidas “Cajas” del PC, ya que sólo podemos llevar con nosotros a 6 miembros en nuestro Equipo Pokémon. Verlos aprender ataques, mejorar y evolucionar a medida que aumentan de nivel, resulta enormemente satisfactorio y, al mismo tiempo, el protagonista va forjando vínculos mientras le ayudan a superar desafíos por el camino.
La evolución es clave para comprender algunos Pokémon. Si bien no todos evolucionan, algunos lo hacen una vez, y otros hasta dos veces, alcanzando hasta tres fases en su línea evolutiva. Esta metamorfosis produce sensación de recompensa en el jugador al ver a sus Pokémon crecer y hacerse fuertes. Uno de los casos más llamativos en el proceso evolutivo de los Pokémon ocurre con Magikarp, que simboliza un cuento tradicional chino donde sólo las carpas que logran ser perseverantes y nadar contracorriente remontando una cascada lograrán convertirse en dragón. Pero que no te engañen sus diseños: al evolucionar a Gyarados, será de tipo agua-volador. Incluso, algunos Pokémon cambian de tipos o adquieren otros nuevos al evolucionar, como Skorupi a Drapion, Swablu a Altaria o Eevee a cualquiera de sus ocho posibles formas evolutivas.
Servicios públicos y sistema productivo en Pokémon
Una vez situado el contexto, una de las primeras tareas que nos veremos obligados a realizar tras haber combatido lo suficiente, será acudir a un Centro Pokémon. En estos locales, descubriremos que, sorprendentemente, en el Mundo Pokémon existe la sanidad pública, ya que curar a tu equipo Pokémon es siempre totalmente gratis, todas las veces que lo necesitemos.
No sólamente contamos con servicios públicos, sino también con todo un sistema productivo, basado en el entrenamiento junto a nuestros Pokémon. En las últimas generaciones, nuestros compañeros nos acompañan a nuestro lado, recogiendo todo tipo de materiales y recursos útiles, tanto para la aventura como para venderlos. Por otro lado, los Gimnasios plantean desafíos difíciles de derrotar para los entrenadores comunes. Al completarlos ganaremos cada vez mayores recompensas, así como regalos con los que nos premian sus líderes. Además, al final de cada combate, quien pierda le hace entrega de cierta cantidad de dinero al entrenador que se haga con la victoria (representado a menudo en los principales juegos de la saga con el símbolo de los yenes), aumentando esta recompensa su valor a medida que vamos venciendo cada vez a entrenadores más poderosos en cada ruta. ¿Os imagináis que los impuestos de la vida real dependan en función del poder adquisitivo de cada individuo? Algo podríamos aprender, ya que parece que Pokémon sí entiende que la presión fiscal debe ajustarse a cada nivel de riqueza. En cualquier caso, gracias a dichas ganancias podremos equipar distintos objetos a nuestros Pokémon, para que puedan lograr mayor potencial golpeando más fuerte o recuperándose durante los combates.
Cada Líder de Gimnasio se especializa en un tipo concreto, así como cada miembro del Alto Mando. Una vez superados todos los Gimnasios, el jugador habrá reunido las suficientes medallas como para retar al Alto Mando y enfrentarse a la élite de la región, para finalmente convertirse en el próximo Campeón. Pero la aventura no termina ahí. Además de la Historia principal, en cada juego aparecen organizaciones clandestinas cuyos planes han de ser desmantelados por el propio jugador, siendo clave de las principales misiones secundarias.
La gestión de la seguridad en Kanto
En el caso de las dos primeras generaciones de Pokémon, teníamos al conocido Team Rocket como banda criminal en las regiones de Kanto y Johto. Este grupo se dedicaba al hurto de Pokémon de otros entrenadores, así como al tráfico de los mismos e incluso a experimentar con ellos para hacerlos más fuertes. Es así como, por ejemplo, acabaron creando a Mewtwo a partir del ADN del Pokémon Mew, tal y como nos mostraron en la primera película de Pokémon. Posteriormente, hicieron su aparición otras muchas organizaciones criminales en las siguientes generaciones. En los videojuegos, habitualmente los Campeones de cada región, acaban ayudando al propio jugador a recopilar pistas en la lucha contra estas bandas, con el objetivo de vencerlas y disolverlas. El protagonista no sólo acaba con sus planes, sino que además, los líderes de estos grupos terminan recapacitando gracias a haberse librado en combate contra el jugador.
Por otro lado, la representación bélica a menudo está presente en numerosas producciones japonesas, desde Pokémon hasta Shingeki no Kyojin (Ataque a los titanes), curiosamente mostrada a través de lo “cuqui” o la estética de la fantasía. Desde una dulce Hello Kitty lanzando rayos láser por los ojos, hasta el pequeño Shin-Chan enfrentándose a ejércitos en sus películas. Así, se consigue mostrar fenómenos como la militarización mediante producciones culturales bonitas o adorables, contenidos fáciles de digerir para las audiencias. En Pokémon, tenemos al Alto Mando. Que en cada generación de Pokémon tengamos una élite formada por los entrenadores más fuertes, ya nos indica que se trata de zonas preparadas para defenderse de ataques inesperados o conflictos que pudieran desestabilizar la región, como la llegada de un Pokémon Legendario que tenga mal genio y pueda acabar con todo.
Poké-críticas, polémicas y controversias
A pesar de su sencillez, el mundo de ficción y fantasía de Pokémon ha despertado críticas por parte de distintas posturas ideológicas, como por ejemplo en sectores concretos del animalismo. La controversia se produjo cuando la organización PETA (People for the Ethical Treatment of Animals) realizó duras críticas a Pokémon, argumentando que el juego fomenta el abuso y maltrato a los animales al capturarlos, entrenarlos y hacerlos combatir. Hay que señalar que, durante los combates los Pokémon no mueren, sino que se debilitan. Esto significa que sólo necesitamos recuperarlos yendo a curar a nuestro equipo en un Centro Pokémon, es decir, queda claro que no les supone ningún sufrimiento.
PETA contra el maltrato Pokémon
En 2012, la organización animalista lanzó una versión parodia del videojuego en donde las criaturas maltratadas se rebelaban contra sus entrenadores para liberarse. La parodia generó cierta controversia, ya que PETA justificó su campaña como una forma de promover el debate sobre el maltrato animal, mientras el público general lo interpretó como una exageración. Lo cierto es que la parodia del juego llegaba a mostrar a las criaturas mutiladas para proyectar su discurso contra el maltrato. De hecho, su crítica llegó a percibirse como contradictoria, dado que su demo paródica contemplaba atacar a los humanos para conseguir la liberación de las criaturas, lo que debilitaba sus argumentos contra el maltrato. Este caso se suma al historial de PETA, quien ha llevado a cabo campañas similares (especialmente insistiendo con los juegos de Nintendo), desarrollando parodias de otros juegos como Mario Kills Tanooki. Dado que su objetivo pudo haber sido una causa muy noble, quizá el problema de estas polémicas con distintos videojuegos no haya sido el mensaje, sino la forma en que se transmite.
Por su parte, la franquicia The Pokémon Company siempre ha promovido el mismo mensaje positivo sobre el trabajo en equipo y la amistad. Es por eso que los Pokémon suben de nivel y evolucionan, porque entrenan junto a sus entrenadores y desarrollan vínculos combatiendo de manera conjunta, cooperando. Basta con ver un campeonato mundial de Pokémon para observar que el modelo competitivo de VGC sigue lógicas de estrategia, tal y como ocurre por ejemplo en partidas de ajedrez o similares. Además, es muy habitual en los videojuegos de la saga localizar multitud de mensajes y diálogos de los personajes promoviendo el compañerismo entre los entrenadores y con los Pokémon.
Estereotipos raciales
Existen otras controversias de Pokémon en el pasado que sí tuvieron mayor impacto social, sobre todo por cuestiones raciales. Durante un episodio especial navideño en su primera temporada del anime, el Pokémon de tipo hielo-psíquico Jynx se convirtió en el centro de una polémica. Su diseño mostraba una apariencia con el rostro completamente negro, labios gruesos y ojos brillantes, lo que acabó provocando comparaciones con aquellos estereotipos raciales típicos de los años 30 y 40 que caricaturizaban a personas racializadas. Finalmente, tras despertar descontento en la comunidad afroamericana por resultar ofensivo, el diseño de Jynx cambió y su rostro pasó a ser de color morado. Además, el episodio acabó siendo censurado para no causar mayores molestias. Otros Pokémon han generado controversias similares, pero no han alcanzado el impacto que Jynx causó en las audiencias y que perdura en el imaginario colectivo del fandom. Así, Pokémon nos ha enseñado que de los errores también se aprende, se deconstruye y se rectifica.
El episodio más polémico
En cuanto a cuál haya sido la polémica más resonada de todas, probablemente hablemos de aquella en la que Pokémon mandó al hospital a 685 niños por epilepsias, mareos y convulsiones. Tuvo tal gravedad este fenómeno que, apenas unos minutos después de finalizar un episodio del anime emitido en 1997 sobre el Pokémon artificial Porygon, centenares de espectadores tuvieron que ser atendidos de urgencia por ataques epilépticos. A pesar de ser eliminado el episodio en que debutaba el primer Pokémon artificial, lo cierto es que los flashes parpadeantes que desencadenaron esta emergencia colectiva fotosensible fueron producidos en realidad por Pikachu. El impacto de aquel acontecimiento ha permanecido en el imaginario colectivo, llegando incluso a ser parodiado en Los Simpsons, cuando la familia de esta animación viaja en un episodio a Japón. Por otro lado, aunque Porygon quedase asociado a este episodio, los creadores le devolvieron su carisma, recibiendo a lo largo de los años hasta dos evoluciones: Porygon2 y Porygon-Z, llegando éstos a ser frecuentes en VGC y aumentando sus características de combate. Hasta le dedicaron un tuit en 2020 homenajeando a Porygon.
Otros episodios han sido también censurados, como aquel donde James (del Team Rocket) se inflaba los pechos para poder participar en un certamen de belleza. Parece que, al fin y al cabo, el diseño de los Pokémon tanto en el anime como en los videojuegos ha sido percibido según las distintas miradas interseccionales de las generaciones que los consumían a lo largo de los años.
Como curiosidad, una de las disputas más raras de Pokémon fue aquella en la que el ilusionista Uri Geller, conocido por su telekinesis doblando cucharas, demandó a la franquicia por su parecido con una de sus criaturas; Kadabra, consiguiendo expulsarla temporalmente de su juego de cartas. Finalmente, en 2020, Geller acabó pidiendo disculpas a Nintendo y se retractó.
Paralelismos entre Pokémon y el mundo real
Algo muy apreciado por el fandom de Pokémon son los detalles de sus videojuegos inspirados en el mundo real. Por ejemplo, cada región está inspirada en algún lugar físico del planeta Tierra. Por ejemplo, Kanto está inspirada en la región homónima de Japón. Las regiones de Johto, Hoenn y Sinnoh (segunda, tercera y cuarta generación) están inspiradas en las regiones de Kansai, Kyushu y Hokkaido respectivamente, también ubicadas en Japón. En cuanto a Teselia / Unova (quinta generación) está inspirada en la ciudad de Nueva York y parte de Nueva Jersey. La región de Kalos (sexta generación) se inspira en Francia, imitando incluso en la ubicación del mapa la Torre Eiffel o el Monte Saint-Michel.
En cuanto a la región de Alola (séptima generación), ésta se inspira en las islas de Hawaii. La región de Galar (octava generación) está inspirada en Reino Unido, sólo que en esa ocasión invirtieron el mapa respecto a su contraparte del mundo real. Y finalmente, la región de Paldea (la novena generación y más reciente de todas) está inspirada en la Península Ibérica, imitando sus accidentes geográficos de manera bastante acertada en el mapa e incluyendo lugares emblemáticos de España y Portugal.
Pokémon Españita: Rojos y Morados
Con los videojuegos más recientes de la saga principal; Pokémon Escarlata y Púrpura, las redes sociales se incendiaron con las comparaciones culturales y nacionales, donde gran cantidad de usuarios se referían a la región de Paldea como “Pokémon Españita”, debido a las inspiraciones tan explícitas de nuestro país.
Por supuesto, cuando jugué a Pokémon Púrpura mi inicial fue Sprigatito, por su clara referencia al lince ibérico en su evolución final: Meowscarada.
Un detalle político interesante sobre la estética de las portadas elegidas para esta generación de videojuegos fue el debate simbólico que no sólo llegó a España con memes y debates virtuales, sino que llegaron incluso a profundizar en las redes desde Japón. Estas reflexiones procedentes del país nipón acerca de la simbología política reflejada en los colores llegó a ser tendencia en Twitter Japan, donde se preguntaban sobre la visible relación con distintas posturas ideológicas en España.
Podría parecer una simple similitud que los japoneses han podido reconocer, sólo que los parecidos no son sólo estéticos. La edición de Pokémon Escarlata tiene su historia basada en el descubrimiento de Pokémon paradoja procedentes del pasado, mientras que en la edición de Pokémon Púrpura proceden del futuro. Las referencias resultan, cuanto menos, ingeniosas. Afortunadamente, el fandom de Pokémon ha sabido compartir estos detalles y mantener este tipo de debates desde la curiosidad, el humor y los memes.
En esta última edición, la comunidad se ha mostrado bastante agradecida con los detalles de los creadores, que se han mostrado más creativos y precisos con sus inspiraciones. Desde bocatas de jamón serrano, panceta o chorizo, hasta tortillas de patatas y pinchos de aceitunas, la gastronomía que aparece en el videojuego es una auténtica maravilla de referencias españolas. En cuanto a lugares físicos, Paldea tiene referencias a la Sagrada Familia de Barcelona, la Plaza Mayor de Madrid o la Ciudad de las Artes y las Ciencias, así como paisajes bien logrados con olivares y con molinos, al más puro estilo manchego.
Además, las comparaciones han sido siempre de manera bidireccional, es decir, que no sólo Pokémon ha imitado en sus regiones a la Tierra, sino que los propios usuarios nos hemos servido del contenido de este universo para expresarnos.
Por ejemplo, los espacios virtuales también se han hecho eco de los propios acontecimientos de la vida real expresados a través de simbología del mundo Pokémon. Por ejemplo, tras el paso de los años, hemos sufrido distintas privatizaciones que han afectado a servicios públicos como el sanitario. No tardaron en aparecer en las redes distintos memes de Pokémon señalando esta problemática:
El fenómeno Pokémon Go
En cuanto a la mayor simbiosis de comunicación interactiva bidireccional entre Pokémon y la vida real, esta se ha dado sin lugar a dudas con el fenómeno de Pokémon Go. La llegada de la franquicia a nuestros smartphones mediante una app revolucionó de nuevo a la comunidad y permitió a Nintendo recuperar su habitual liderazgo en la industria.
Los negocios locales también se han beneficiado de Pokémon Go, dado que se incentiva el consumo en las conocidas Poképaradas por aumentar el porcentaje de aparición de Pokémon salvajes, atrayendo a su vez a potenciales clientes. Tener acceso a wifi o cargadores para móviles rentabiliza los negocios que frecuenten los jugadores.
Por supuesto, Pokémon Go también atravesó sus propias polémicas. Una de las más memorables a nivel político, fue la polémica que se creó cuando, a través de esta app, un usuario encontró en el Museo del Holocausto a un Koffing, el Pokémon gas venenoso. La grotesca noticia cobró tal relevancia que el propio Washington Post envió a un reportero para comprobarlo. Se llegó a señalar incluso como montaje, pero lo cierto es que la aparición de los Pokémon en esta plataforma depende de condiciones geográficas, atmosféricas, continentales y otros factores.
Lo que sí tienen en común todos y cada uno de los diferentes debates generados alrededor de las distintas comparaciones entre Pokémon y el mundo real, son su capacidad para transmitir enormes cantidades de información en unidades tan sencillas de transmitir como los memes o los vídeos de formato corto en redes. Las posturas generadas en torno a estos debates, generan en la comunidad todo tipo de interacciones virtuales, posicionamientos políticos, vínculos entre jugadores, rivalidades entre posturas e intercambio de ideas, amplificando todo dentro y fuera del fandom.
El poder simbólico en los memes y fanfics de Pokémon
Hay tantos memes de Pokémon, que podríamos decir que casi existe uno para cada criatura. Quizá unos sean más populares que otros, pero ninguno deja indiferente a nadie. El más reconocido en España quizá sea el de Dragonite patriótico. Claro está que no podría ser otro, ya que además Dragonite es mi Pokémon favorito. Esta imagen tiene su origen en una escena donde este Pokémon aparece con una postura solemne, mirando al infinito y con la zarpa en el pecho. Este meme se utiliza en redes para simbolizar el patriotismo, de modo que a menudo hemos podido ver a Dragonite con banderas como la de España o incluso la de Andalucía a sus espaldas. Podría quedarse ahí, en un simple meme, pero lo cierto es que llegó a utilizarse durante un acto oficial de la Junta de Andalucía, lo que pudo haber desatado problemas por copyright con Nintendo.
Otro de los memes más memorables de Pokémon es aquel de Squirtle diciendo “vamo a calmarno”, donde aparece haciendo el típico gesto con las manos rogando calma.
Pero, el contenido político de Pokémon, no se queda sólamente en sus memes. También contamos con fanfics (fanfictions: ficciones extraoficiales creadas por el fandom), así como numerosas teorías conspirativas en la comunidad. Una de las más conocidas afirma que los miembros del Team Rocket, a pesar de ser vistos como los antagonistas, no serían los villanos, sino revolucionarios que querrían “liberar” a los Pokémon. Aunque haya sido refutada; puesto que la banda fue desarticulada evidenciando sus planes malévolos, esta teoría cobra fuerza cuando prestamos atención al lema del Team Rocket:
“Para proteger al mundo de la devastación. Para unir a todos los pueblos en una sola nación. Para denunciar a los enemigos de la verdad y el amor. Para extender nuestro poder más allá del espacio exterior. Jessie y James. ¡El Team Rocket despega a la velocidad de la luz! ¡Rendíos ahora o preparaos para luchar! ¡Meowth, bien dicho!”.
Lo cierto es que, a nivel discursivo, su lema es de un alto contenido político, pero hay algo todavía más curioso, y es que en una ocasión del anime, los miembros del Team Rocket llegaron a pronunciar su discurso con acento andaluz, resaltando el folclore y la cultura del flamenco, con mucho arte y al ritmo de unas castañuelas. Otra referencia a nuestra cultura.
Sin embargo, existen en las sombras de internet una enorme cantidad de memes que han acabado atormentando a los fans de Pokémon, y con razón. Esto se debe a que, lamentablemente, la franquicia de Pokémon tampoco se ha librado de la famosa Rule 34, un meme de internet que afirma que cualquier contenido virtual en la red será sexualizado. Aunque son muchos los Pokémon que han acabado siendo víctimas de la Rule 34; como Gardevoir o Lopunny, quizá el más conocido sea el caso de Vaporeon, donde a causa de un grotesco texto, tan escandaloso como perturbador, escrito por un usuario anónimo en un foro de la plataforma de 4Chan, acabó haciéndose viral en las redes sociales, logrando miles de búsquedas y dividiendo al mismo tiempo a la comunidad. A pesar de ello, el fandom consiguió convertir algo tan turbio como esto en motivo de broma, de modo que ahora el meme de Vaporeon ha terminado siendo, en la mayoría de las ocasiones, objeto de humor. Desgraciadamente, tras este incidente, es bastante posible que Vaporeon haya dejado de ser el Pokémon favorito de muchos jugadores.
Es necesario añadir que, cuando hablamos de poder simbólico, es fundamental definirse siempre frente al otro. ¿Qué ocurre con Nintendo? Todo el mundo sabe que no ha competido directamente con PlayStation y XBox, permitiéndose llevar su propio ritmo y calendario de lanzamiento de nuevas entregas en las diferentes generaciones. Y en cuanto a The Pokémon Company, su tremenda idiosincrasia creativa le ha permitido destacarse frente a franquicias similares, llegando a opacarlas con el paso de los años. En sus inicios, fue un debate recurrente de los patios de recreo si los chavales éramos más fans de Pokémon o de Digimon. Hace una veintena nos hizo gracia la comparación por diferencias narrativas, creativas o de jugabilidad. Hoy, la polémica por semejanzas ha regresado con Palworld, no sólo por los parecidos razonables sino por el alcance de la batalla legal.
Una franquicia tan popular como Pokémon estaba destinada a verse rodeada de controversias de todo tipo. Se nos hace interesante saber cuál es tu Pokémon favorito y, más aún, ¿qué debate planteado sobre Pokémon ha sido tu favorito?